Hace dos semanas pidieron a Abe Lowenthal y Sergio Bitar hablar sobre la transición chilena de hace 30 años, y las lecciones que puede brindar, en un evento público con lideres de la oposición incluyendo a Juan Guiadó y Julio Borges. Ayudé a Abe desarrollar sus ideas de como aplicar su vasto conocimiento de transiciones, al caso de Venezuela, y le aconsejé que diera un mensaje claro y sin endulcorante dado la seriedad de la situación y la necesidad de una reorientación significativa en la estrategia de la oposición. Después de la reunión virtual, resumimos sus comentarios en un artículo en español para el New York Times. (Publicado em português na Folha de S.Paulo.)

Aquí uno de los párafos claves:

La oposición democrática debe aceptar que no llegarán milagros desde el exterior. Lo que a menudo se designa como la “comunidad internacional” en realidad son países individuales que, especialmente ahora, tienen problemas propios en los que se están enfocando y no se puede confiar en que vayan a asumir grandes riesgos o costos ni que vayan a invertir mucha energía para resolver las dificultades internas de otro país. Los poderes externos pueden ser relevantes, pero solo si apoyan una estrategia determinada a nivel nacional y solo en la medida en que puedan hacerlo sin contradecir sus propios intereses o enfrentar costos significativos.